La Riomaggiore en Italia: Información sobre el lugar:
Riomaggiore: pueblo italiano más al sur que existe en la península itálica, es un destino muy exótico. Allí, una exquisita riqueza natural se funde con una antiquísima y atractiva arquitectura de forma muy singular. Este lugar es espectacular para las parejas más románticas.
La Riomaggiore:
Eran las 19:00 de aquella tarde de verano, donde se veía desde aquella ventana en la que me alojaba una hermosa ave volar en el cielo tan espléndido que hacía; en la que también podía contemplar esas vistas al mar azulado, donde se podía ver como una pareja se besaba enfrente de esa puesta de sol, como si de una película de amor se tratase, como si sus labios estuviesen sellados y condenados a cadena perpetua para todo la vida, ay de aquellos, que serán... Después de aquellas vistas, un agua no estaría mal...sentir caer el agua, como si me estuvieses acariciando con tus manos... Pues llegaba tarde, ya me estaba esperando aquel hombre que conocí en el mismo lugar donde aquellos enamorados estuvieron.
Me vestí elegantemente, como si de una princesa tratase, me apañé y salí. Allí estaba, esperándome en el mismo banco donde me dijo el primer "te quiero" tan sincero que pude escuchar de mis pequeñas orejas, las cuales rojas se pusieron, como si de pasión se hablase. Las 21:00, quien lo iba a decir, tan puntual como si de un trabajo fuese. Elegante, con su olor que me ruborizaba, su fragancia que me llamaba como si inotizarme quisiese. Acercándonos a un restaurante, mirábamos las preciosas luces que de noche iluminaban el precioso pueblo de Riomaggiore, como si fuesen luciérnagas. Entramos al acojedor restaurante, y allí pedimos; después de un largo tiempo brindamos, pero, ¿a qué fue debido? Ah claro, aquel lujoso hombre le concibió matrimonio a la mujer de sus sueños, de sus ojos. En aquel restaurante tan exótico donde pasados los años, en vacaciones, después de casarse y haber formado una familia, disfrutaban de su boda de plata junto a sus hijos, de la cuál esta historia es contada por su madre en este preciso momento, donde en este preciso instante están sentados en el mismo lugar donde su padre le contrajo matrimonio.
Me vestí elegantemente, como si de una princesa tratase, me apañé y salí. Allí estaba, esperándome en el mismo banco donde me dijo el primer "te quiero" tan sincero que pude escuchar de mis pequeñas orejas, las cuales rojas se pusieron, como si de pasión se hablase. Las 21:00, quien lo iba a decir, tan puntual como si de un trabajo fuese. Elegante, con su olor que me ruborizaba, su fragancia que me llamaba como si inotizarme quisiese. Acercándonos a un restaurante, mirábamos las preciosas luces que de noche iluminaban el precioso pueblo de Riomaggiore, como si fuesen luciérnagas. Entramos al acojedor restaurante, y allí pedimos; después de un largo tiempo brindamos, pero, ¿a qué fue debido? Ah claro, aquel lujoso hombre le concibió matrimonio a la mujer de sus sueños, de sus ojos. En aquel restaurante tan exótico donde pasados los años, en vacaciones, después de casarse y haber formado una familia, disfrutaban de su boda de plata junto a sus hijos, de la cuál esta historia es contada por su madre en este preciso momento, donde en este preciso instante están sentados en el mismo lugar donde su padre le contrajo matrimonio.
Hola, Sandra. Me encanta tu historia y cómo relatas ese amor como si fueras una verdadera poeta. Verdaderamente, has elegido una muy buena foto y la has podido aprovechar muy bien.
ResponderEliminarUn saludo, Max
Hola Max. Me alegra que te haya gustado la forma en la que me he expresado para realizar esta historia y que te haya gustado y llamado la atención la foto, sin la foto la historia no hubiese tenido sentido jajaja.
EliminarUn saludo, Sandra.